Eretza desde Sodupe
En el centro del pueblo, junto a un pequeño parking público, encontramos una estrada asfaltada que comienza a ascender con fuerte pendiente. Junto al parking encontramos un cartel que nos indica que ese camino nos lleva al Eretza. Es una ascensión considerable pese a la baja altitud de la cima, ya que el punto de partida se encuentra a pocos metros sobre el nivel del mar.
En las primeras rampas, debido al desnivel en los arcenes encontramos pequeños escalones de cemento, para facilitar el ascenso. La estrada pronto adquiere mayor pendiente y se transforma en una pista cementada. El camino cementado acaba junto a los últimos baserris de Sodupe, para continuar ascendiendo en forma de pista de tierra.
Esta pista no tiene pérdida, nos llevará siempre ascendiendo, eso sí ahora ya con menos pendiente hasta el pequeño barrio de «», donde encontramos dos baserris junto a una pequeña ermita, digna de visitar.
Continuamos nuestro camino por la pista que atraviesa el barrio, para llegar a un pequeño collado. Aquí encontramos un cruce de pistas. Por un lado a mano izquierda desde el camino que traemos encontramos un pista que asciende, por que la que se puede volver hacia Sodupe. De frente encontramos una pista que desciende hacia Sopuerta, y otra que asciende ala derecha, pasando un pequeño portillo. Esta última es la que tenemos que seguir.
Ascendemos por la pista, atentos a mano derecha, ya que antes de llegar a un terreno privado al final de la misma, tenemos que coger un camino que parte a mano derecha entre setos. Este camino asciende entre espinos y algún pequeño arbol, para llegar más arriba a una pista más ancha de tierra. Nosotros atravesamos esta pista para seguir ascendiendo por un pequeño camino, entre rocas y espinos, que toma dirección a la quebrada. Siguiendo este pequeño caminito, llegamos a una verja, con un paso, que nos permite salvarla junto a la entrada a un pinar.
El camino sin embargo deja a mano derecha el pinar, para seguir ascendiendo a mano izquierda. Finalmente este camino llega hasta el collado, donde encontramos un refugio de montaña, un merendero y una fuente, donde podemos repostar.
A partir del refugio, podemos tomar varias alternativas para coronar el Eretza. Nosotros en este caso buscaremos la vía más rápida. Comenzamos por la pista ancha que parte del refugio, cruzando un portillo para evitar el paso del ganado.
Esta pista gira enseguida a la izquierda, para bordear la falda del monte. Aquí podemos o bien seguir la pista para ascender bordeando el Eretza, o abandonar la pista principal, para ascender campo a través, dejando el bosquecito que cubre la loma a mano derecha. No hay pérdida, si mantenemos los árboles a nuestro lado.
Este camino nos lleva de nuevo a una pista principal que cruzamos para seguir ascendiendo de manera dura y directa. Finalmente llegamos a lo alto de una loma, para continuar de nuevo hacia los árboles, que esta vez encontraremos a la izquierda del camino. Un senderito asciende paralelo a los mismos, por un pelada loma en gran pendiente. Desde aquí nos quedan los últimos esfuerzos. Seguimos dejando los árboles siempre a mano izquierda. Al llegar a lo que parece ser el alto, veremos como el camino parece bordear el bosque torciendo a la izquierda y dejando a la vista por fin la cima del Eretza. Desde aquí solo nos queda ascender por la pelada loma hasta la cima, coronado por un par de buzones, un punto geodésico y un monumento bastante grande a un mendizale.