Abrazos a cuatro
Mi aportación al día de la poesía en el contexto amplio en el que vivimos.
ABRAZOS A CUATRO
Mar de aguas frías y cálidas
sigue abrazándome en los continentes, ¡así! ¡así…!
Ininteligencias humanoides que aventan arrogancias y absolutos
en este diminuto punto del pluriverso
no saben lo que es tu abrazo,
no saben de ósculos infinitos en los azules de los valles y montañas,
ni de la más chiquita flor que sonríe desterrada.
¡Sigue abrazándome con fuerza! ¡Así! ¡Así…!
¡No me sueltes, gran amada!
Ahora sí, ahora me acarician tus aguas claras,
quizá haya sido un diminuto virus,
nanosombra de la muerte en batalla no anunciada.
¿Lo has oído? El aire también abraza.
Brinda todos los soles de la mañana
y aletea claro, limpio, sin mácula.
Pero… ¿Qué escucho? ¿Qué son esos gritos?
¿No te duele el alma?
Ininteligencias humanoides lloran, nos llaman.
Son gritos de miedo, pero…
¿no serán nuevas patrañas?
Aire oxigenado, limpio, agua sin contaminar,
cálida de abrazos, cálida de humanidad renovada.
Aire y agua, nueva pangea y humanidad nueva…
¡Abracémonos a cuatro!