TRISTEZA DE LAS TRISTEZAS
Ha fallecido Unai Santos. Vivió el proceso completo como chaval en Goizalde, después monitor. Siempre amigo.
UNAI
Te has marchado, Unai, en la sombra de la sombra de este virus.
¿Lo ves? Tú mueres, el virus sigue vivo, como un aviso de la sombra
que levanta el dedo cruel y nos avisa:
¡No podéis juntaros para llorar!
¡No hay despedidas…!
Te has ido sin la mano cálida de las personas que más te quieren,
sin esa lágrima del último abrazo,
soledad fría y dura que se extiende como una plaga desnuda
en las paredes desvestidas de cada hospital.
Te has ido de Bego, de Genaro, de Charo, de Bea,
Y del resto de tu familia, amigos y amigas.
Te has ido de las fotografías de viajes, comidas, excursiones y campamentos,
de tus proyectos de vida, de tus sueños…
pero no, todo tu ser no se ha ido, se ha quedado en nuestras almas,
y en esa mirada bonachona, como una bendición,
que ahora nos dice: ¡Os quiero arco iris, luz del cielo entre las lágrimas!
Que Dios padre-madre te acoja.
J.S.